Luego de tres años, la lucha de los vecinos de barrio San Antonio continúa
Vecinos de barrio San Antonio reclaman por la erradicación de la planta industrial Porta Hnos. S.A, a causa de la contaminación que produce su funcionamiento. La misma se encargada de la producción de licores, alcoholes y vinagre.
La fábrica, ubicada en esquina camino San Antonio y avenida de Circunvalación, cuenta con autorización por parte de la Municipalidad, la cual la habilitó por medio de una resolución y en ese marco la empresa continuó operando. Sin embargo la ordenanza N° 8.133 expresa: “la zona IVb permite actividades industriales e industriales-rurales (…), en donde no se admitirá el uso residencial” que data de 1985, teniendo en cuenta el comienzo de la construcción de los barrios en los años 70´ y la llegada de la industria en los 90´.
Los vecinos realizan protestas y manifestaciones por la erradicación de la planta de bioetanol desde hace más de tres años, ante la falta de respuestas por parte del intendente Ramón Mestre, un grupo de ellos decidieron encadenarse en el Palacio Municipal hasta obtener una respuesta tras los reclamos que vienen efectuando durante tanto tiempo.
Luego de cinco días, sin ser recibidos por ningún dirigente, viviendo el atropello, las amenazas policiales y la vulneración de derechos fundamentales de parte de las autoridades (no dejaron ingresar agua, comida y no le permitieron a las personas encadenadas ir al baño) el intendente se comprometió a brindar una entrevista para el día viernes 8 de mayo, a la cual no asistió debido a la inauguración de una obra en Villa El Libertador.
Luego de las situaciones de disconformidad que vivieron los vecinos, quienes se encadenaron para conseguir una respuesta, actualmente se encuentran más unidos que nunca al seguir planificando métodos y formas para luchar por su salud y la de todos aquellos que comparten ésta causa en común.
El diseño elegido, de la calavera y la cámara antigás, tanto en sus remeras como en las banderas podemos verlas representadas en carteles de gran tamaño pegados al frente de las viviendas que se encuentran al alrededor de la fábrica. Toda aquella persona que se acerque al barrio siente el constante mal olor con el cual conviven los vecinos, por lo cual deben permanecer con puertas y ventanas cerradas, muchos de ellos optaron por mudarse de sus hogares a causa del olor producido por la fábrica, y en otras situaciones por las enfermedades que presentaban.
Discussion about this post